La era digital ha traído consigo un amplio volumen de ventajas competitivas para el sector empresarial. No obstante, es indiscutible que también han surgido múltiples riesgos tecnológicos.

Hoy valoramos algunos de los principales riesgos tecnológicos contemporáneos y cómo plantarles cara con contundencia.

Principales riesgos tecnológicos de las empresas contemporáneas

Un riesgo tecnológico es aquel que, como su propio nombre indica, afecta a la infraestructura digital y de hardware de las empresas. Unos peligros de carácter legal y administrativo que hay que aprender a controlar con diligencia.

Ahora bien, el primer paso para una correcta gestión de los nuevos peligros corporativos reside en el conocimiento de dichos riesgos tecnológicos.

Encontramos múltiples ejemplos en diferentes sistemas virtuales y electrónicos. Sin embargo, algunos destacan más que otros. ¡Veámoslos en detalle!

El auge de la Inteligencia Artificial

La Inteligencia Artificial ha llegado para quedarse y su valor en las empresas no deja de aumentar. Una tecnología de automatización que ofrece innumerables prestaciones para incrementar la productividad e incluso la seguridad de las organizaciones.

Ahora bien, es irrebatible que la IA es responsable de muchos de los riesgos tecnológicos que atraviesa el sector corporativo hoy en día.

Mediante estos sistemas, los ciberdelincuentes pueden diseñar ataques de ingeniería social y de phishing más convincentes. También crear malwares adaptativos. Dos acciones que ponen en jaque la integridad de cualquier compañía.

Además, la integración de la IA no se debe hacer a la ligera. Si no se apuesta por tecnologías de alto nivel, los resultados de la automatización pueden llevar a pérdidas y problemas de rendimiento.

Riesgos en la tecnología cloud

Otro de los principales ejemplos de riesgos tecnológicos reside en los sistemas cloud. Es decir, en las soluciones de la nube.

Al implementar estos sistemas de almacenamiento virtuales, se corre el riesgo de que los datos se pierdan o caigan en manos inadecuadas. Bien sea por las brechas de ciberseguridad o los accesos no autorizados, la tecnología cloud requiere un extra de seguridad.

Asimismo, la pérdida de control de la información de la compañía y de los procesos (como bien sucede con los ERP) puede afectar a la confidencialidad empresarial.

Todo ello sin dejar de lado que, sin una buena fase de formación previa, la gestión de estos programas se puede complicar. Algo que, de nuevo, afecta a la productividad.

Infraestructuras de IT siempre en evolución

Las infraestructuras de IT están compuestas por equipos de hardware, redes y software de última generación. Sin embargo, es en este concepto de modernidad en el que encontramos un nuevo riesgo tecnológico.

Las empresas deben estar a la última en tecnología para asumir las enormes exigencias del mercado actual. Solo mediante una adaptabilidad continua y un mantenimiento periódico se alcanza el éxito en este aspecto.

Es más, estas infraestructuras deben adaptarse a las nuevas normativas. De lo contrario, los riesgos tecnológicos se convierten en riesgos legales.

Cómo prevenir los nuevos riesgos tecnológicos

Para anticipar los riesgos tecnológicos de nuestro tiempo es crucial tener en el equipo a los mejores expertos en la materia. Unos profesionales especializados en el diseño de estrategias de mitigación y planes de acción contundentes.

Estas figuras gozan de una alta demanda en las empresas de todo el mundo. Siendo, por tanto, un puesto de enorme empleabilidad. Aquí te presentamos algunas de sus principales acciones:

• Formación del personal. Enseñar a la plantilla a manejar los últimos sistemas tecnológicos, bien sean soluciones cloud o de IA, es el primer paso hacia la prevención de los riesgos y el aumento de la productividad.
• Políticas de gobernanza. Las nuevas políticas de gobernanza se deben dirigir a la protección integral de los datos. Nada de filtraciones de información sensible.
• Nuevos sistemas de ciberseguridad. La implementación de sistemas de gestión de la identidad en la nube requiere la integración de soluciones de acceso privado. También es importante optimizar los algoritmos de la IA para evitar manipulaciones maliciosas.
• Monitoreo constante. Todo esto requiere de una monitorización constante por parte de los expertos en la gestión de riesgos tecnológicos. Hay que auditar periódicamente para adelantarse a los problemas.

Máster en Gestión de Riesgos

Conviene señalar que conocer los principales riesgos tecnológicos es solo la punta del iceberg. Interpretarlos correctamente para crear planes de contingencia eficientes requiere de un aprendizaje profundo de esta materia.

En nuestro Máster en Gestión de Riesgos aprenderás todos los peligros que atraviesan las empresas actuales, sean tecnológicos o no. Una formación 100% online que te preparará para enfrentar con contundencia cualquier posible riesgo.

Al finalizar el máster, serás uno de los principales responsables de la estabilidad de las grandes organizaciones. Lo cual evidencia el enorme valor que vas a generar en las empresas que te contraten.

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