El riesgo financiero al que se enfrenan empresas y bancos hace referencia a la incertidumbre producida en el rendimiento de una inversión. Una incertidumbre que surge de posibles cambios en el sector en el que se opera, la imposibilidad de devolución del capital por una de las partes o por la propia inestabilidad de los mercados financieros. La gestión de riesgos financieros es por tanto fundamental. Sin embargo, los expertos en Risk Management también han de entender qué son los riesgos no financieros y atenderlos.

Qué es un riesgo no financiero

Como su propio nombre indica, un riesgo no financiero es aquel que no tiene un origen financiero, pero que impacta de forma cuantificable en la propia empresa. De esta forma, no es un riesgo de crédito, de mercado o de tipo de interés, sino de otro tipo. En ocasiones este tipo de riesgos no financieros es difícil de cuantificar.

Tipos de riesgos no financieros

En la Gestión de Riesgos no financieros se pueden detectar hasta seis tipos de riesgos que no tienen su origen en actividades bancarias.

1. El Riesgo reputacional como riesgo no financiero

El riesgo reputacional es la posibilidad de que haya una pérdida de reputación en la organización de cara a la percepción social que se tiene sobre la misma. Esto puede ocurrir, por ejemplo, porque un banco tenga que ser rescatado por un Gobierno nacional.

2. Riesgo operacional, ¿es un riesgo no financiero?

El riesgo operacional podría ser considerado como un riesgo financiero, pero son muchas las empresas y entidades que lo gestionan como un riesgo no financiero. Este riesgo se basa en la posibilidad de pérdida debido a la inadecuación o a fallos de los procesos, el personal y los sistemas internos o bien a causa de acontecimientos externos.

3. El riesgo estratégico en empresas y entidades bancarias

El riesgo estratégico es el impacto actual y futuro en los ingresos y el capital que podría surgir de las decisiones adversas de negocios. Puede deberse a la aplicación indebida de las decisiones o por falta de capacidad de respuesta a los cambios de la industria.

4. Riesgo de conducta

El riesgo de conducta es un tipo de riesgo no financiero que consiste en las pérdidas que puede sufrir una entidad financiera a raíz de su mala conducta. Por ejemplo, por el incumplimiento de normativas o por la venta abusiva de productos financieros.

5. Ciberseguridad como riesgo no financiero

La ciberseguridad es una forma de afrontar los riesgos digitales a los que se enfrentan empresas y bancos. Se trata de proteger los archivos de información para evitar todo tipo de ciberamenazas, como el pishing o el envío de malware.

6. Riesgo de Compliance o de Cumplimiento Corporativo

Otro riesgo no financiero en las empresas es el riesgo de cumplimiento corporativo. Es decir, la posibilidad de sufrir una pérdida a causa de una sanción legal por incumplimiento de una ley. Esto se puede materializar en multas, sanciones, etc.

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