Una estrategia empresarial implica mucho más que números. Mercadona es una empresa en la que muchos quieren trabajar y atractiva para todos los stakeholders, empezando por sus empleados.
El éxito permanente de esta organización radica en los cinco pilares de su cultura empresarial:
- El cliente como jefe. Se trata de seguir una estrategia de siempre precios bajos (SPB). Se rompe con la estrategia convencional de maximizar el beneficio. Estos precios mínimos permiten obtener beneficios para todos. Además, se saca de la mediocridad a las marcas blancas.
- El trabajador. Los salarios son altos, lo que se traduce en una alta productividad. La idea de productividad no implica trabajar más, sino trabajar mejor. Hay una conciliación del trabajo con la vida familiar. Se exige al trabajador, pero dándole oportunidades de desarrollo.
- El proveedor. Surge el término del interproveedor, que asume un modelo de calidad total y mantiene una relación al largo plazo. Además, hay una presión constante para bajar precios. En la adversidad, se reducen los márgenes y se mejoran los procesos y el tamaño. De este modo, cada ahorro infinitesimal se multiplica por millones de artículos.
- La sociedad. Mercadona aporta una variedad al PIB (Producto Interior Bruto). Genera puestos de trabajo, con apertura de tiendas alrededor de cada supermercado nuevo. También, dona de alimentos a instituciones benéficas. Su existencia y actividad tiene un impacto social, económico, político, académico, deportivo,…
- El capital. Roig es rico y es el único español en la lista Forbes con una empresa no cotizada.
Mercadona cuenta en su estrategia empresarial con una cultura del esfuerzo. Esta cultura está basada en dar, perdir, exigir y en la verdad universal de la reciprocidad. Esta compañía plasma la idea de que rectificar no es una marcha atrás, sino un cambio de sentido.
Información extraída del webinar impartido por Sol Quesada para EALDE Business School.
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