El compliance o cumplimiento normativo ha evolucionado mucho en los últimos tiempos. Y es que, cualquier empresa u organización con vocación de éxito sostenible a largo plazo necesita mantener una cultura de integridad y cumplimiento. Se trata, no sólo de garantizar el cumplimiento de las leyes, sino también de los valores, principios y códigos de conducta que asumen las organizaciones. Para ello, han quedado claro los beneficios de los sistemas de cumplimiento normativo.

Para qué sirve el compliance

El cumplimiento corporativo o compliance es la capacidad que tiene una organización de garantizar que sus empleados, sus contratistas o sus asociados cumplan con las leyes, los reglamentos, las normas, las prácticas éticas, las políticas y los acuerdos internos que tienen alcance sobre la organización. En sectores muy regulados y complejos como el financiero o el farmacéutico, esta función es muy importante.

Y es que, en definitiva, contar con un sistema de compliance evitará pérdidas, sanciones y otros riesgos procedentes de incumplimientos en los que pueda incurrir una empresa.

Beneficios de los sistemas de cumplimiento normativo

Podemos encontrar numerosos beneficios de un sistema de cumplimiento:

1. Evitar condenas penales

La función de compliance tiene el objetivo de prevenir la comisión de delitos. Estos delitos pueden llevar a que se condene penalmente a la persona jurídica o a los administradores de una empresa. Por ello, un sistema de compliance evitará este tipo de situaciones.

2. Evitar el fraude interno

Contar con protocolos y sistemas de control de cumplimiento entre los empleados y colaboradores de una organización ayudará a evitar el fraude interno. Este fraude puede generar importantes pérdidas reputacionales a una empresa, por lo que prevenirlo es fundamental.

3. Prevenir sanciones judiciales y administrativas

No estar al tanto de las nuevas regulaciones, o simplemente incumplir las ya existente por desconocerlas, puede generar sanciones económicas importantes para la organización. En este sentido, el sistema de compliance permitirá estar siempre vigilante a que se cumple toda la normativa.

4. Mejor la competitividad de la organización

Mostrarse como una empresa comprometida con el cumplimiento normativo permite generar más confianza de cara a clientes, proveedores o socios de negocio. En este sentido, el compliance es un elemento clave para la reputación de la empresa y puede abrirle nuevas oportunidades de negocio.

5. Favorece a los mercados

El compromiso y los principios de buen gobierno corporativo en las organizaciones disminuye los riesgos y la incertidumbre en las transacciones comerciales. Además, genera confianza de cara a los inversores, lo que permite mejorar la rentabilidad de las organizaciones. Por ello, es uno de los beneficios indirectos de contar un sistema de cumplimiento.

6. Prevención de riesgos de lavado de activos

El lavado de activos o blanqueo de capitales es un delito financiero que puede afectar a cualquier tipo de empresa. Un sistema de compliance evitará riesgos relacionados con este tipo de delitos. 

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